LA VERDAD SOBRE LAS DROGAS SINTÉTICAS
La Fundación por un Mundo Libre de Drogas disipa las mentiras que promueven las drogas diseñadas como “no dañinas”

La marihuana sintética se llama dappo habu en Japón, “drogas que bordean la ley” y su nombre benigno puede ser un factor significativo en la poca conciencia del público sobre sus efectos dañinos. Sin embargo, desde enero a mayo del 2012, más de 100 visitas a salas de emergencia tuvieron que ver con drogas sintéticas.

En una campaña para sensibilizar del peligro de la droga, Nao Mazaki directora de la filial japonesa de un Mundo Libre de Drogas, primero evaluó las actitudes hacia la droga, en concreto entre la gente joven; el objetivo primario de los fabricantes de la droga sintética.

En Japón, las drogas sintéticas las venden los traficantes en máquinas expendedoras.

Una encuesta hecha en el 2012 a 6.150 estudiantes de secundaria y preparatoria en Tokio y en los alrededores de Saitama y Kanagawa encontró que muchos estudiantes consideraban la posesión y el uso de las drogas sintéticas “como un asunto de decisión personal” y “no es mala si no va en contra de la ley”.

Además, casi el doble, tanto de estudiantes de secundaria como de estudiantes de preparatoria, informaron que habían usado drogas sintéticas.

“Los jóvenes podían comprar drogas sintéticas en la calle, en Internet e incluso en máquinas expendedoras situadas fuera de sus escuelas”, dijo Mazaki.

La falta de conocimiento de los peligros de las drogas sintéticas fue un problema no sólo con los estudiantes sino también con los maestros, descubrió Mazaki. “Me quedé sorprendido con un maestro que dijo: ‘Pensé que estaba bien usar hierba, ya que se llama hierba’”.

Más investigación sobre el conocimiento de los maestros de estas substancias reveló que el 30% de ellos no podían explicar los efectos dañinos de las drogas sintéticas, mientras que el 63% decía que ellos podrían “a duras penas explicarlo” y el 84.4% le daba la bienvenida a la educación acerca de los daños de las drogas sintéticas.

Los voluntarios de un Mundo Libre de Drogas llegan a millones de personas con La Verdad sobre las Drogas, en programas de radio y TV que aparecen por todo Japón.

En respuesta, Mazaki elevó sus esfuerzos para llevar la verdad acerca de las drogas sintéticas, tanto a estudiantes como a maestros. Ella unió sus esfuerzos con la Asociación de Seguridad de Todo Japón Yomiuri, organización nacional para la prevención del crimen, afiliada al periódico de mayor tirada del país, Yomiuri Shimbun. Mediante esta asociación, el programa de la Verdad sobre las Drogas se volvió un componente oficial de la presentación de la organización en las escuelas.

Mediante sus propios programas, Mazaki y su fuerza de voluntarios repartieron 2,4 millones de folletos de la Verdad sobre las Drogas, coordinaron 800 eventos e impartieron conferencias y presentaciones sobre la educación de drogas a casi 50.000 estudiantes. El mensaje también apareció en la televisión nacional y en publicaciones impresas con una circulación combinada de más de 30 millones.

La Cámara de los Miembros del Consejo de Hirotaka Ishikawa publicó un reconocimiento por el trabajo de prevención de drogas para Mazaki y la Fundación por un Mundo Libre de Drogas:

“Como resultado de sus actividades educativas a gran escala, ustedes han protegido a miles de jóvenes de los efectos mortales de esas substancias previamente desconocidas... Sus acciones han contribuido considerablemente a fortalecer las medidas educativas y legales, frente a la proliferación de drogas sintéticas. Su valiosa contribución para ayudar a salvaguardar a la juventud japonesa contra los daños de las drogas, se debería elogiar infinitamente”

Cámara de Consejeros Miembros Hirotaka Ishikawa
La Fundación por un Mundo Libre de Drogas de Japón ha presentado La Verdad sobre las Drogas a 50.000 estudiantes en 200 escuelas.


HECHOS
Elaboración de las Drogas “Legales”

Para entender lo que es la marihuana sintética y otras drogas sintéticas, uno tiene que saber lo que es una “droga de diseño”.

Una droga de diseño es una versión sintética de una droga ilegal. Su composición química está ligeramente alterada para evitar su clasificación de ilegal. Es esencialmente un experimento de un químico clandestino para crear una nueva droga “legal”.

Cuando las fuerzas de la ley y el orden se dan cuenta de que es una droga sintética y la prohíben por ley, los químicos clandestinos crean otra versión alterada que ahora escapa a la clasificación de “ilegal”. Y así el ciclo se repite.



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